“Muy fea para violarla, no se lo merece” es el insulto de diputado brasileño a colega

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    Jair Bolsonaro, diputado de oposición con mayor votación en Rio de Janeiro, increpó a su colega, Maria do Rosario Nunes, diciéndole en plena sesión de la cámara, que ella lo había llamado violador en una ocasión, y que él no la violaría jamás porque no se lo merecía. Posteriormente de esta incitación al odio y a la violencia, el parlamentario recalcó sus dichos, afirmando que su colega es muy fea para ser violada.

    “¡Quédate ahí Maria do Rosario! Hace unos días me llamaste violador. Y dije que no te violaba porque no mereces”, le replicó furioso el militar en retiro. Nunes, quien es ex ministra de Derechos Humanos y legisladora oficialista del partido de la presidenta Dilma Rousseff, se encuentra haciendo las demandas respectivas por injurias y calumnia, mientras la fiscalía presentó una denuncia por incitación pública a la violación.

    Las protestas y repudio a esta acción del diputado se manifestaron ampliamente en las redes sociales y en varias ciudades de Brasil, donde a diario se denuncian en promedio 137 agresiones sexuales, sumando un total de 143 mil violaciones al año.

    “Esto sí merece ser denunciado vehementemente. Es un estímulo a la violencia contra la mujer. Una persona con la actitud de este señor no puede ser representante de ningún sector de la sociedad”, dijo a la AFP Lucia Rincón, dirigente de la Unión Nacional de Mujeres,  organización feminista que encabeza protestas en las calles de Brasilia, Rio de Janeiro y Manaus contra Bolsonaro.

    El parlamentario, quien es homofóbico  y partidario de la pena de muerte en casos de violación,  se escudó de las réplicas recibidas a su agresión, diciendo que Nunes en 2003 cuando él defendía un proyecto de ley para castigar a menores infractores, ella lo habría culpado indirectamente de una agresión sexual cometida por adolescentes, y que frente a eso, él solo podía decir que jamás la violaría, porque no era de su tipo, y además era muy fea.

    No siendo suficiente esta agresión, el parlamentario también manifestó que no pediría disculpas a su colega. Este caso, como muchos otros, deja ver el machismo dominante en Brasil, y las actitudes y prácticas misóginas por parte de quienes legislan y gobiernan el país.

    Noticia original aquí.